lunes, 29 de marzo de 2010

PROFUNDO EL COLOR DE LAS COSAS



I


Pasan las horas desnudando la verdad del reloj.

Hoy nos saludara el viento y nos llamaremos sin nombrarnos

El color de las cosas varia extrañamente cuando tu estas presente.

El jazz suena sofocando las ideas de muerte.


II

Las dos caras de la luna paralelas a nuestro ombligo

Nada va a alejar mi deseo por abrazar el centro mismo de tu universo

La mañana revela el secreto de tus ojos

Yo solo pienso lo que piensan los que aman...


III

Estrello mi satélite contra la luna

Miraremos con asombro el color de las cosas mutándose

Evitaremos los efectos de la luz transformándose

El paisaje se satura con imágenes inmóviles.


IV


Cantan las amapolas en la noche heroinómana

Lloraremos bajo la lluvia sobre las piedras azules

Lameremos el musgo y dormiremos junto al rio

Llegara la mañana nuestras almas estarán desnudas.



V

Profundo el color de las cosas

Nuestras pupilas enceguecidas con crisoles cromáticos

Alucinan las conciencias con paraísos irreales

Te espero en mi jardín caleidoscópico.



DIEGO LOZANO

1 comentario:

Andrés Bastardo Grenouille dijo...

Yo también he visto ese profundo color, como el rojo de mis uñas cuando trato de rasgar mi piel que siempre es gris, entonces suelto gemidos anaranjados en medio de la habitación, manchando las paredes en donde rebotan... me ha gustado este poema. Un abrazo.