viernes, 25 de noviembre de 2011

COMPÁS DE ESPERA


Así como la mañana turba.
Abres los ojos
y el sol arriba...
La noche llega
vestida con su fantasía.
Todo padece una fatalidad inerte.
El día y su prisa...
El pasar de las horas.
Las estaciones que se deshojan
y florecen.
La danza inconclusa
de las manos batiéndose y
la despedida...
El tic tac del reloj.
El adiós. La huida.
Ya nada permanece.
Se desgasta
hasta la sonrisa.
La mueca en el rostro
y el astro que agoniza.
Ya es mañana
y hoy temprano, era de día.
Se aposentó un verso
en un compás eterno
que dibuja círculos y círculos.
Sempiterno regreso,
la hora finita...
Y yo. Mustia y quieta.
Como esfinge de yeso,
espero...
Cruel y dulce agonía..."

Maria Fernando Ceballos Calvache.

No hay comentarios: